Análisis - PlayStation All-Stars Battle Royale (PS3 / PS Vita)

Cuentan que Sony lleva copiando a Nintendo desde que nació. No hay motivos para pensar esto en un principio, todo el mundo sabría diferenciar el tipo de público al que se dirigen los productos de cada empresa. Pero claro, cosas como el PlayStation Move dan que pensar... De todos modos, y como dijo un usuario al que mantendré en el anonimato: "Que algo sea una copia no siempre quiere decir que sea malo", y es el caso del juego que analizaremos hoy. Un brawler que recoge varias influencias de la saga Super Smash Bros. y posee un plantel compuesto por personajes de Sony. ¡Al turrón!

¿Un Super Smash Bros. de Sony? ¿Esto ha existido?

Sí, así es. PlayStation All-Stars Battle Royale (caray, ¿no tenían un título más largo?) es un brawler en toda regla cuya plantilla de luchadores está casi completamente constituida por personajes de las consolas PlayStation. Curiosamente, estando fuertemente influenciado por Super Smash Bros., Sony tuvo la idea de que este título se publicara tanto en sobremesa como en portátil antes que la propia Nintendo; si bien, en este caso, tanto una versión como otra son el mismo juego y admiten función cross-play (es decir, tanto jugadores de PS3 como de PS Vita pueden jugar juntos). Es más, al adquirir la versión de PS3, se te obsequiará con una copia digital del juego para PS Vita, así que ya empezamos a hablar en positivo.

Gráficamente, hay muy poca diferencia entre la versión de 

sobremesa y la de portátil, fruto de la gran potencia de Vita.

Con respecto a los gráficos, cumple muy bien. Algunos personajes incluso se han visto favorecidos, como Sackboy y Jak, mientras que a otros como Nathan Drake han tenido que rebajarlos un poco, pero aun así ninguno se ve nada mal. Lo mismo se puede decir de los escenarios y los efectos, todo correcto. Si bien no son unos gráficos impresionantes para la versión de PS3, entre esta versión y la de PS Vita casi no existen diferencias. Es lo que tiene ser la consola portátil más bestial jamás creada, ¿no creéis? Qué pena que no podamos elogiar del mismo modo al sonido. No hay ninguna remezcla memorable de las canciones más conocidas, y el tema principal es genérico y con poco gancho. Eso sí, como aspecto positivo, podemos elegir entre dos temas de victoria exclusivos para cada personaje. 

La jugabilidad es lo que saldría mezclando un fighter con un brawler. ¿No te queda claro en inglés? Te lo explicaré con otras palabras: en sí, el juego es un brawler con libertad de movimiento, un máximo de cuatro jugadores en pantalla y escenarios repletos de trampas y plataformas, pero hay implementado un sutil sistema de combos. Si tienes los reflejos necesarios, puedes asestar muchos golpes seguidos mientras te pitorreas sin piedad de tu contrincante. Es más, cada uno de los personajes cuenta con dos tutoriales: uno para conocer todos sus movimientos y otro para aprender sus posibles combos. 

Los escenarios cuentan con una particularidad: se fusionan con

otras sagas, como en este caso, PaRappa the Rapper y Killzone.

Como podéis ver en la imagen de arriba, los escenarios pertenecen a franquicias de Sony. Sin embargo, al llevar un tiempo luchando en ellos, serán invadidos con elementos de otras sagas. Por ejemplo, es posible jugar en el Hades, escenario de God of War III, y que, pasado un rato, aparezcan los lanceros de Patapon arrojando sus armas. Es un concepto muy interesante que añade mucho atractivo al juego, y es posible desactivar las trampas antes de empezar una partida en las opciones. A esto se añade la posibilidad de elegir entre tres modalidades de juego: por tiempo (el que consiga mayor puntuación en un tiempo límite gana), por muertes (vence quien llegue antes a la punutación indicada) o por vidas (quien termine la partida conservando al menos una vida se lleva la victoria). 

Lo que sí cambia radicalmente con respecto a otros juegos es la forma de obtener puntos: los personajes tienen salud ilimitada, por lo que no puedes vencerlos con tus movimientos ni con obstáculos del escenario. Será necesario llenar una barra que aparece en la pantalla a la derecha del logo de tu personaje. Dicha barra puede cargarse hasta tres niveles, dándote en cada nivel el derecho a ejecutar un ataque letal. Cuanto mayor sea el número, más preciso será el movimiento y más muertes podrás obtener. En el caso de algunos personajes como Spike o Toro, el ataque más poderoso es imposible de evitar, lo que significa que se llevan tantos puntos como oponentes estén luchando. Eso significa que no basta con machacar a tu enemigo: tienes que asestar el golpe letal, ¡no querrás desperdiciarlo! Esto le da a PlayStation All-Stars Battle Royale un sello muy distintivo en su jugabilidad. 

Por supuesto, puedes usar objetos que te beneficiarán, pero...

¿Acaso no es cierto que los jugadores justos los desactivan?

Ahora, toca hablar de los modos de juego: arcade, misiones, tutoriales, entrenamiento, online (que a su vez tiene modalidades clasificatorias, amistosas, libres y por equipos) y local. Esto... ¿Ya está? No sé, en principio no suena mal, pero el modo de misiones es siempre el mismo para cualquier personaje, todos ellos tienen prácticamente los mismos objetivos y sólo sirven para subirlos más rápidamente de rango. Por cierto, el rango de los personajes sirve para desbloquear fondos e iconos para tu tarjeta, la cual será visible en tus partidas online, así como burlas, secuencias de introducción, trajes y temas de victoria para el personaje en cuestión. Lamentablemente, es uno de esos títulos que necesita el terrible pase online para acceder a dichas funciones. En serio, es lo peor que he visto en el mundo de los videojuegos desde el formato episódico. 

El modo arcade tampoco es como para tirar cohetes, son varios combates efectuados siempre en el mismo orden: un número determinado de batallas con distintas normas en las que lo único que cambia son los oponentes, un enfrentamiento con el rival de tu personaje y un combate final contra Polygon Man. ¿No os acordáis de él? Iba a ser la mascota de Sony durante la generación de la PlayStation, pero creyeron que no tenía suficiente gancho y la descartaron. Aquí ha vuelto, y parece que no le ha sentado muy bien esa muestra de desprecio, pues te atacará con sus copias poligonales de otros personajes (hmmm, ¿dónde habré visto yo eso?) al mismo tiempo que se transforma en los peligros de los escenarios que te has encontrado por el camino. 

Para ser el título de Sony en homenaje a todas sus estrellas, anda muy escaso de modos y variedad. ¿No habría estado bien un modo historia elaborado? Pero elaborado de verdad, no con cuatro o cinco dibujos estáticos como en el modo arcade, sino con cutscenes y verdadera relación entre los personajes, explicando sus rivalidades y alianzas, como se hizo en el Mortal Kombat de la pasada generación. Y hablando de los personajes...

Hay un total de 20, todos desbloqueados desde el principio, más cuatro que pueden adquirirse por medio de un pago (cinco pavos cada uno, casi nada, aunque dos de ellos eran gratis durante las primeras semanas de su salida). Esto hace un total de 24 personajes; no es una mala cifra, pero parece que no supieron elegir muy bien a los luchadores. Muchos de ellos ni siquiera son exclusivos, aunque tampoco vamos a poner pegas en ese sentido, ya que algunos como Dante de Devil May Cry (que por cierto, viene con ese diseño moderno que a tanta gente disgustó) o Heihachi de Tekken han tenido mucha presencia en las consolas de Sony, pero otros como Big Daddy de Bioshock o Isaac Clarke de Dead Space parecen no pintar mucho ahí. 

Por otra parte, personajes como la Princesa Gorda de Fat Princess, Emmett Graves de Starhawk o Nariko de Heavenly Sword, no tienen un gran legado a sus espaldas como para merecer estrictamente ese puesto en el juego. De hecho, se planteó introducir a Lara Croft de Tomb Raider, pero fue descartada. Además, Activision pedía una suma importante por la inclusión de Crash Bandicoot y Sony no pudo (o no quiso) pagarla. En resumidas cuentas, parece ser que quisieron tirar de las licencias menos caras e incorporar personajes de la propia casa poco memorables. A esto añadid que dos personajes son las versiones buena y malvada de Cole, protagonista de inFamous. Podrían haber dejado un espacio para otro luchador y hacer que, por ejemplo, el movimiento letal de nivel 1 de Cole, además de causar bajas, cambiase su karma de bueno a malo y viceversa, dando mucha más variedad al personaje. 

Y ni hablemos de lo desequilibrados que están... Mientras que con algunos como Sly Cooper, Sir Daniel o Kat tienes que currártelo un poco para conseguir muchos puntos, otros como Zeus y Kratos llenan su barra en un periquete con pocos golpes difíciles de evitar. Ni siquiera los parches ayudan, no han balanceado lo suficiente el juego y muchos luchadores siguen estando demasiado rotos. Luchadores que, como es de esperar, te encontrarás frecuentemente en las partidas online. Viva la variedad, ¿eh?

Por no hablar de que Polygon Man es absurdamente fácil de 

vencer. Te van a dar más problemas sus esbirros que él mismo.

¿Conclusiones?

Un juego que podría haber sido mucho más de lo que es. No es un mal juego en absoluto, y es muy divertido cuando juegas con amigos, pero cargaba con una responsabilidad muy grande sobre sus hombros: convertirse en el mejor homenaje a las consolas de Sony jamás visto. En lugar de eso, se ha quedado a medio camino, con pocos modos de juego, una selección de personajes mejorable y un combate nada equilibrado. Aun así, si eres capaz de ignorar esos defectos y disfrutar de su jugabilidad fresca, PlayStation All-Stars Battle Royale puede darte mucho entretenimiento.

Gráficos

Más que correctos. Todos los elementos se ven y mueven bien en pantalla, por lo que no se presenta ninguna queja en este apartado.

Sonido

Todos los personajes (excepto Sly) tienen sus voces originales, y al ser un juego de Sony, la mayoría de ellos cuentan con doblaje en español. Aun así, la banda sonora se ha quedado muy corta.

Jugabilidad

En su favor, el sistema de muertes y los controles le dan bastante personalidad. En su contra, algunos personajes están demasiado "dopados", por así decirlo.

Duración

Si hablamos de conseguir los trofeos, el platino no te llevará un tiempo excesivo. Ahora bien, si pretendes superar todos los modos y subir al rango 999 con todos los luchadores... Estás mal de la cabeza.

Lo mejor

· Los usuarios de Sony pueden disfrutar de su propio brawler.

· El apartado gráfico cumple de sobra.

· La ejecución de los movimientos es intuitiva y hay cierto componente de combos.

Lo peor

· Escasos modos de juego.

· Selección de personajes que no sacia del todo.

· Hace falta un pase online para jugar vía PlayStation Network.

Nota final

7

Análisis - Dark Souls (PS3 / Xbox 360 / PC)

¿Alguna vez has oído hablar de una persona famosa cuya fecha de nacimiento sea un misterio? Es el caso de Hidetaka Miyazaki, al cual, al parecer, "no le gusta explicar su vida" (o eso pone en la Wikipedia). Hace unos años, este diseñador de videojuegos habría sido totalmente desconocido para muchos, pero dio el salto a la fama en 2009, tras un lustro en la compañía From Software, como director de Demon's Souls, una genialidad imprescindible en el catálogo de cualquier usuario de PlayStation 3. Siento enrollarme, pero es necesario poneros al día: dos años más tarde, vio la luz su sucesor espiritual, por lo que muchos jugadores de Demon's Souls ya sabían lo que ello conllevaba, y no era ni más ni menos que un juego de rol duro y con una ambientación medieval europea y oscura. La buena noticia es que éste no se quedó en una sola consola, por lo que los jugadores de Xbox 360 (y un año después, de PC) también pudieron disfrutarlo. ¡Preparaos para morir!

Me han comentado que es un juego difícil. ¿Es eso cierto?

¿Difícil? Es despellejante. Dark Souls desconoce lo que es la misericordia; cada enfrentamiento, por breve y mínimo que sea, pondrá a prueba todos tus sentidos y tus reflejos; notarás el frío sudor naciendo de tu frente ante el peligro que acecha en cualquier remoto rincón de Lordran, se te tratará con crueldad y malicia desde el primer momento...

Tranquilo/a, te estaba tomando el pelo. En realidad Dark Souls no es tan difícil como la opinión popular lo hace ver, pero eso no significa que sea un juego malo, ¡para nada! De hecho, hay muchísimas cosas buenas que decir sobre la que es, para muchos, la mayor obra maestra de From Software. El suyo es un caso peculiar, pues es la secuela espiritual de una secuela espiritual (os lo explico: Dark Souls es una secuela no directa de Demon's Souls, que al mismo tiempo se inspiró en cierta medida en King's Field, salvo porque este último se jugaba en primera persona, y no en tercera como los pertenecientes a la saga Souls). Podría hablaros de la historia, pero... Ésa es gran parte de la gracia: no te enteras de la historia inmediatamente, sino que la vas descubriendo a medida que obtienes objetos, por cotidianos que sean, y visitas lugares. Es sublime, y Miyazaki lo planteó todo de forma tan precisa que es muy fácil darse cuenta de diferentes coherencias entre escenarios, enemigos y acontecimientos anteriores a tu llegada al sitio en cuestión. La trama principal es la siguiente: eres el elegido de los no muertos, seres afectados por una maldición que les permite resucitar tras la muerte, a costa de perder su cordura con el tiempo. Has de emprender una odisea en busca de las cuatro almas más poderosas de Lordran para ser conocido como aquel ser que extendió la próspera Edad del Fuego, o como quien se convirtió en el no muerto que inició la Edad de la Humanidad. 

¿Demasiada información de golpe? Aquí tienes un resumen:

debes enfrentarte a bicharracos como éste. ¿Así está mejor?

Nada despampanante en cuanto a gráficos, eso es cierto, pero tiene un nivel justo y necesario para que resulte agradable a cualquiera. A pesar de no poseer un motor gráfico brutal, la ambientación y el inigualable diseño de niveles suplen estas carencias. Esto último, de hecho, es el mayor punto a favor de Dark Souls: a diferencia del anterior Demon's Souls, el cual, a pesar de poseer un magnífico diseño de escenarios, los planteaba de un modo similar a la pantalla de selección de niveles de Crash Bandicoot 3 (ya sabéis, un "lobby" desde el cual elegir nuestro destino sin dejar de controlar al personaje), en Dark Souls se optó por un mundo completamente forjado, con zonas conectadas entre unas y otras. ¡Y os sorprenderá la coherencia tan precisa que sostienen estos eslabones! Puedes incluso formar un mapa en tu cabeza con suma facilidad gracias a lo sencillo que resulta localizar un área porque sabes que es lo normal, lo que encontrarías tras esa maleza, arco, puerta o lo que sea. Esto no quiere decir que Dark Souls tenga una estética excesivamente monotemática, ¡qué va! A lo largo de nuestra travesía por Lordran, descubriremos paisajes tan diferentes como sorprendentes, aunque yo mencionaré mis dos favoritos: el Lago de la Ceniza y Anor Londo. 

Una pena que las versiones de consola tengan esos bajones de frames tan molestos. Ya estaban presentes en Demon's Souls, especialmente en el Valle de la Corrupción. Qué irónico, puesto que una parte similar de Dark Souls, llamada Ciudad Infestada, sufre los peores bajones de todo el juego. En serio, he visto más fotogramas en las cinemáticas de Bayonetta que en mi visita a esta zona. Pensaríais que la cosa se solucionaría en la versión de PC, y... Bueno, no encontramos bajadas de frames, eso es verdad, pero estos están bloqueados a un máximo de treinta, en lugar de sesenta, como en la mayoría de juegos. ¿Había realmente necesidad de hacer esto? Existe un archivo no oficial que permite eliminar dicho límite, aparte de agregar mejoras gráficas, pero lo más probable es que te dé errores o que directamente el juego no se abra, y quitar el bloqueo de frames puede generar glitches en las cajas de impacto. Vamos, un desastre de port.

La antigua ciudad de los dioses te invita a entrar en su inmensa

catedral. Cada zona crea la atmósfera perfecta para nuestro deleite.

Puestos a hablar de tu personaje, has de crearlo al inicio de tu aventura. Además de sexo y físico (cosas que no influyen en el desarrollo de tu no muerto), debes escoger la clase inicial. A diferencia de otros juegos de rol en los que la selección de una clase determina el acceso a armas y habilidades durante el resto de la partida, en Dark Souls sólo se concretarán tus objetos, armas, armadura, estadísticas y magias (en caso de poseerlas) iniciales. Por poner un ejemplo: puedes comenzar la aventura con un vagabundo (clase especializada en armas de destreza, rápidas y con efectos adicionales como golpes críticos aumentados y sangrado) y terminarla como si hubieras desarrollado un bandido (cuya principal baza son las armas de fuerza, muy pesadas y lentas pero increíblemente poderosas). Al mismo tiempo, nos encontramos con tres ramas de magia: hechizos (propios de los hechiceros, principalmente ofensivos), milagros (la especialidad de los clérigos, centrados en la sanación y la protección, aunque algunos causan daño eléctrico) y piromancias (potentes hechizos de fuego y veneno que cualquiera puede utilizar sin importar sus estadísticas). 

En el último paréntesis, hemos mencionado las estadísticas. Hablemos de ellas: necesitas almas que recolectas de tus enemigos o de ciertos consumibles para subir de nivel. Cada vez que subes de nivel, añades un punto a una estadística y tus resistencias generales aumentan. Dichas estadísticas son:

· Vitalidad: la salud máxima del no muerto. Al llegar a cero, mueres, sucumbiendo a penalizaciones como la pérdida de humanidad y almas obtenidas, aunque con una posibilidad de volver y recuperarlas. Aumentar la vitalidad significa incrementar la barra de salud (indicada en rojo). 

· Aguante: la capacidad del no muerto para correr, atacar, bloquear y esquivar sin fatigarse. Cuanto más alto sea este valor, mayor será la longitud de la barra de resistencia (indicada en verde). Aumentar el aguante también sirve para soportar una carga mayor y el daño por sangrado.

· Aprendizaje: si deseas aprender hechizos, milagros y/o piromancias, deberás subir esta estadística. El aprendizaje desbloquea ranuras de magia, hasta un máximo de diez. ¡Ojo, hay magias que ocupan más de una ranura! Según se dice, el aprendizaje también mejora la probabilidad de encontrar objetos.

· Fuerza: la estadística necesaria para empuñar armas de gran tamaño y peso. Subir la fuerza favorece el daño producido por armas que escalen por dicha estadística. La fuerza necesaria para manejar un arma es menor si ésta se coge con las dos manos. 

· Destreza: las armas centradas en destreza no son tan bestiales como las de fuerza, pero acostumbran a ser muy veloces y algunas incluso aplican efectos extra como golpes críticos especialmente letales y daño por sangrado. Al parecer, también aumenta la velocidad de ejecución de algunas magias.

· Resistencia: las defensas generales suben independientemente de la estadística que elijas, pero la resistencia, además de acelerar dicha subida, favorece la resistencia del no muerto al veneno, un molesto estado alterado que va reduciendo la salud poco a poco.

· Inteligencia: a niveles altos, otorga acceso a numerosos y destructivos hechizos. La magia de almas es muy poderosa y puede usarse a cierta distancia contra el objetivo. Con la expansión Artorias of the Abyss, podremos obtener brutales magias oscuras, sorprendentemente dañinas.

· Fe: además de incrementar las resistencias mágica y sagrada, la fe permite potenciar y acceder a diferentes milagros. La mayoría de estos se basan en restablecer salud y otorgar barreras temporales, pero algunos permiten arrojar jabalinas eléctricas o provocar ondas expansivas.

Una vez te acostumbras a su jugabilidad, Dark Souls se vuelve

extraordinariamente divertido y variado. ¡Dale una oportunidad!

¡Ah, me olvidaba! Los personajes que encontraremos durante nuestra aventura son inolvidables. Algunos son extravagantes, otros más callados, y otros incluso inocentes. Hablando con ellos, descubriremos datos sobre lo acontecido en Lordran durante nuestra ausencia. Nos encariñaremos con muchos de ellos, mientras que a otros les cogeremos un tremendo asco. Podrás contemplar sus pasos al mismo tiempo que das los tuyos, topándote con ellos en distintos lugares, normalmente dispuestos a ayudar o a compensarte. Si completas sus historias, por así decirlo, las recompensas pueden ser suculentas. La primera vez que lo intentes tal vez no lo logres, pero por probar...

La jugabilidad es idéntica a la de Demon's Souls, lo que significa que encontraremos pequeños toques de hack n' slash y combinaciones de objetos en cada mano. Puedes probar los equipos más eficaces, roleros o locos que imagines. ¿Qué me dices de ir con un escudo a dos manos? ¿O con dos mazas gigantes? Recuerda que el peso de tu equipo determina tu capacidad para esquivar y tu velocidad de movimiento, así que no te cargues como una mula. A todo esto, hay que agregar que, haciendo honor a una de las mayores bazas de su antecesor, Dark Souls cuenta con unos jefes finales impresionantes, cada uno con su propia estrategia, además de ser sobresalientes tanto en trasfondo como en diseño. De todos ellos, sin duda, me quedo con Sif, un gigantesco lobo gris que combate blandiendo una inmensa espada con la boca. Por lo general, las armas de fuerza son las más eficientes a la hora de hacer frente a los enemigos y jefes que encuentras durante tu aventura. Por otro lado, las armas de destreza son más utilizadas en duelos contra otros jugadores, lo que nos lleva al siguiente punto: el apartado online.

En Demon's Souls, para resucitar como humano, debías ayudar a alguien a derrotar a un jefe o invadir el mundo de otro usuario y matarlo. En Dark Souls, no necesitas ser un hueco (es decir, haber perdido la humanidad) para acceder a las funciones online, ¡lo cual es una suerte! Ayudar a otros jugadores siempre es divertido, y es tan fácil como dejar una señal en el suelo. Cualquiera que la vea puede tocarla y, en ese instante, serás invocado a su mundo. Necesitas ser humano para invocar a otros no muertos, lo cual incluye a personajes del juego controlados por la IA como Solaire de Astora o Tarkus Hierro Negro. ¡Pero cuidado! Los humanos (especialmente los que han pecado matando a inocentes o rompiendo pactos) pueden ser invadidos por espíritus oscuros (representados de color rojo) o espíritus vengadores (con tonos azules). Estos espíritus son otros jugadores, y el vencedor recibirá una cantidad de almas equivalente a un porcentaje de las que poseía el contrario. 

Todo esto está muy bien, pero hay un fallo monumental, algo que destruye completamente la agradable experiencia online de Dark Souls: su horrible netcode. ¿Te ha pasado alguna vez que te has alejado lo suficiente de un invasor pero aun así éste ha logrado apuñalarte por la espalda incluso a una distancia increíble? ¿O que has recibido un ataque a distancia a pesar de estar a tres metros de la zona de impacto? No, no es problema de tu conexión; sencillamente, el netcode de Dark Souls es (sin ánimo de ofender a los desarrolladores) una auténtica basura. Las acciones tardan demasiado en llegar, lo cual favorece en múltiples ocasiones, y de manera injusta, a uno de los dos usuarios. Éste es un problema que se arregló (no del todo, pero sí en gran parte) en Dark Souls II. Aun así, la experiencia cooperativa es muy disfrutable y beneficiosa para todos, especialmente para aquellos que pertenecen a determinados pactos.

Se te advertirá cuando un invasor entre en tu mundo, pero

¡ay de ti si no lo ves venir! Algunos son realmente crueles...

Hay un total de nueve pactos esparcidos por todo Lordran, y puedes acceder a todos ellos si buscas bien o cumples ciertos requisitos. Estos son:

Blanca Vía: El pacto para principiantes. Los caballeros y clérigos pertenecen por defecto a este grupo de acólitos. Permite encontrar señales de invocación con más facilidad, por lo que es perfecto para el cooperativo. Según los rumores, pertenecer al pacto de la Blanca Vía aumenta ligeramente la recuperación de energía.

Guerrero de la Luz Solar: Otro pacto centrado en el cooperativo. Además de aumentar la probabilidad de encontrar señales de invocación, te dará acceso a poderosos milagros eléctricos, además de aprender la legendaria pose "Praise the Sun". Ayudar a otros a matar jefes perteneciendo a este pacto hará que recibas medallas de la Luz Solar, necesarias para subir de rango.

Guardia de la Princesa: ¡Y otro más para el cooperativo! Como los dos anteriores, aumenta las señales que encuentras, pero además de eso, te otorga acceso a milagros defensivos muy eficaces. Por desgracia, dichos milagros requieren una cantidad increíble de fe, pero vale la pena si quieres tener a tus aliados rindiendo al cien por cien.

Camino del Dragón: De los más locos, sin duda. Mediante este pacto, podrás convertirte parcial o completamente en un dragonoide, lo que te otorgará habilidades nuevas como escupir aliento de dragón. Esto requiere que te quites el yelmo o toda la armadura según qué transformación quieras. Si le cortas la cola al dragón inmortal que te permite unirte al pacto, recibirás un espadón muy chulo. ¡Y no se romperá el pacto por ello!

Siervo del Rey del Cementerio: Nito es uno de los jefes más importantes de Dark Souls y, como tal, has de vencerlo, pero antes de eso, puedes unirte a su pacto. Gracias a dicho pacto, puedes infestar los mundos de otros jugadores, colocando criaturas más poderosas hasta que mueras o el jugador del mundo infestado te mate. Además, recibirás un milagro que te permite invocar sables del suelo y una espada como la de Nito. Aunque lo mates después, seguirás perteneciendo al pacto.

Cazador de los Bosques: Ubicado en la zona preferida de los jugadores PvP. El objetivo es defender el bosque de los intrusos, es decir, de los jugadores que no pertenezcan a este pacto. En cuanto hayas vencido a tres oponentes, recibirás un anillo que te vuelve parcialmente invisible. Como beneficio, podrás ir a ver a Shiva en Ciudad Infestada, quien te venderá armas raras como la Uchigatana.

Espectro Oscuro: El pacto por excelencia de los invasores. Se sube de nivel ofreciendo humanidad. Entre las recompensas, encontramos un orbe rojo que te permite invadir ilimitadamente, una mano oscura que hace que robes humanidad líquida a otros (si lo usas contra los NPC's amistosos, ¡estos no se cabrearán contigo!) o el set completo de Espectro Oscuro.

Siervo del Caos: Es el único pacto que no guarda relación con el online, pero es útil si quieres aprender las piromancias más destructivas y completar la historia de Solaire. Al igual que el pacto anterior, para subir de rango en éste necesitas humanidad. Ofrece muchas y abrirás un atajo a Izalith Perdida, el lugar más parecido al Infierno que verás en todo Lordran. Abrir este atajo es crucial para salvar la vida del valeroso caballero de la Luz Solar.

Espada de la Luna Oscura: En Dark Souls, es posible pecar asesinando a inocentes, rompiendo pactos... Tal y como mencionamos anteriormente. Los nombres de los pecadores están registrados en el Libro de los Culpables, y los Espadas de la Luna Oscura se encargan de invadir sus mundos como espíritus de venganza azules. Se sube de rango matando culpables y cortándoles una oreja a modo de recompensa. ¡Ten cuidado: si atraviesas la niebla frente al lugar del pacto, te enfrentarás a Gwyndolin y lo romperás!

Ser un dragonoide tiene la desventaja de no llevar armadura, pero

te otorga habilidades físicas beneficiosas... ¡Y aliento de dragón!

¿Conclusiones?

Me joroba mucho no poder ponerle un diez de nota, ya que es un juego hecho con muchísimo mimo a los detalles, además de traer una jugabilidad muy única. Pero esos problemas en el online y los bajones de frames lastran lo suyo... Aun así, Dark Souls es un grandioso título, muy memorable y que seguirá viéndose de maravilla en un futuro lejano, tal y como le pasó a Silent Hill 3 en su día. 

Gráficos

Problemas con los fotogramas en las versiones de consolas y malísimo port a PC. A pesar de esos defectos, el aspecto en general es correcto y los escenarios tienen un diseño como no se ha visto en ningún juego.

Sonido

¡Hala, si no hemos hablado de la música! La mayoría del tiempo, ésta estará ausente, sonando sólo en momentos clave, sobre todo durante las batallas contra jefes. Sobra decir que la música es muy épica.

Jugabilidad

Recoge muchos aspectos de Demon's Souls, mejorándolos con nuevas armas y movimientos como los ataques en salto o en caída. El cooperativo es divertido, pero el PvP es casi injugable debido al netcode.

Duración
La primera vez te costará superar tu peregrinación a la tierra de los no muertos. El desafío se alarga gracias a la opción "new game +" y la expansión Artorias of the Abyss, con nuevas zonas, objetos y jefes.

Lo mejor

· Un lore muy profundo que nos permite vivir la historia en nuestras carnes de no muerto.

· El apartado visual no decepciona ni pizca, llevándose la palma los escenarios.

· Dificultad perfecta y una jugabilidad que hace que sientas que tus hazañas tienen gran mérito.

Lo peor

· Bajones de frames muy bestias en consolas y un mal port a PC.

· Netcode que arruina por completo la experiencia PvP.

· La traducción al español es un poco mejorable.

Nota final

9'5